Esta seta, conocida comúnmente como el Lactario blanco del chopo o Lactario controverso, es bastante frecuente encontrarla en las orillas, o márgenes de arroyos y riachuelos, creciendo debajo de planifolios, con preferencia de los chopos con quién mantiene una relación simbiótica de micorriza. Su época de aparición se extiende entre el verano y el otoño.
En ciertas ocasiones algunos individuos, pueden presentar un gran tamaño, llegando alcanzar los 30 cm de diámetro del sombrero, mientras que el pie suele ser por lo general, bastante corto, aunque macizo y compacto.
Para no confundir esta especie con otra que se le parezca, debemos fijarnos en ciertos detalles como: en sus láminas, de color rosado o rosado-vinoso, las esfumaciones también rosadas que presentan su sombrero, su sabor un poco amargo y algo acre, su margen muy incurvado, sobre todo en ejemplares jóvenes, de ahí su nombre controversus = controverso (con el vértice revuelto) y por su puesto su hábitat tan exclusivo como es el bosque de rivera.
Comestible mediocre según algunos autores, aunque yo, no aconsejo que se consuma, debido a su sabor, quien la ingiera no corre ningún peligro, salvo aquel de comer una seta poco apetecible.
Este post se lo dedico a uno de mis últimos seguidores, además de ser una gran persona, es un magnífico compañero de una de mis muchas aficiones, en este caso la espeleología. Te he elegido esta seta en particular, porque se que eres un buen recolector de este Género, principalmente del conocidísimo Níscalo (Lactarius deliciosus). Un fuerte abrazo Diego Mendoza, y nos vemos por nuestro gran Club de Alta Ruta.