Ciempiés

(Scolopendra cingulata)

Invertebrado predador de rápidos movimientos, con un largo y delgado cuerpo segmentado, con un par de patas en cada segmento. Presenta 21 pares de patas, de los que destaca el último par, debido a su robustez y por mostrar numerosas y fuertes espinas. El primer par está modificado profundamente en un par de robustas garras en forma de pinza que se encuentra horizontalmente por debajo de su cabeza. Esta tiene un par de antenas en forma de hilo, y tres pares de maxilares.

La cabeza consiste en una sola cápsula en forma de lenteja. Las antenas están insertas por delante y los grupos de ojos simples u ocelos, si se presentan, se localizan detrás de las antenas, en la frente y a los lados de la cabeza. El cuerpo está aplastado dorso-ventralmente. La cutícula es igual que la de los insectos. El número de pares de patas es siempre impar.

Cuando anda, una onda de movimientos pasa a lo largo de las hileras de patas, de modo que sólo 1 de cada 8 se encuentra sobre el suelo en un momento determinado. Las patas de un lado están en fase opuesta a las del otro, y así balancean los puntos de apoyo.

Su coloración es muy variable, desde un marrón verdoso hasta marrón amarillento, más claro en los ejemplares jóvenes, con bandas transversales más oscuras. 

Los ciempiés son generalmente nocturnos, y durante el día permanecen en el suelo, bajo piedras o cortezas, y en las grietas. Salen por la noche, para vagar por la superficie o escalar los árboles y paredes en búsqueda de sus presas animales a las que inmoviliza por la inyección de veneno a través de sus pinzas. Usualmente caza invertebrados.

Datos curiosos:

- Hay cerca de 2.750 especies de ciempiés por todo el mundo.

- La Scolopendra gigantea de Brasil alcanza los 26 cm de longitud. Esta especie en concreto puede llegar a cazar escorpiones, lagartos y pequeños pájaros.

- Cabe destacar también que presenta alrededor de su cuerpo glándulas secretoras de sustancias tóxicas para la piel. 

- La especie de ciempiés más rápida, que es la Scutigera, alcanzando una velocidad de 50 cm por segundo. 

- La picadura de la escolopendra crea normalmente una lesión rodeada con un círculo rojo con dolor, edema y prurito, que no suele durar más de 48 horas. En alguna ocasión puede complicarse apareciendo espasmos musculares, alteración del ritmo cardíaco, y alguna vez inflamación de los ganglios linfáticos cercanos a la zona afectada. La picadura de una escolopendra de las especies grandes puede llegar a ser mortal.

- Es el miriápodo de mayor tamaño de Europa.